Ir de una página a otra ya no sólo consiste en mostrar una página diferente a la que se está viendo actualmente, sino que hay que hacer la transición dotándola de estilo y de cierto diseño. Para ello la mejor forma es emplear CSS para realizar esta operación que puede significar un gran cambio y pasar de ser una buena web a una web fantástica y la diferencia está en esos pequeños detalles. Podemos ver un buen ejemplo de esto en el siguiente enlace donde nos muestran con varias demos cómo realizar este tipo de transiciones entre distintas páginas y a la vez explicarnos el código empleado al hacerlo.
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